Harry Potter y las Reliquias de la Muerte de J. K. Rowling

Harry ha perdido su protección mágica al cumplir los diecisiete años además tiene la responsabilidad de destruir los siete horrocruxes antes de que Voldermort pueda encontrarlo en algún lugar del mundo, el ministerio está en su contra pues al poco tiempo de cambiar al primer ministro, se le descubrió muerto y su cambio se hizo irremediable a otro mago dominado por el hechizo imperius por lo que saben que es un títere del Señor Oscuro.

Llegan las responsabilidades a los tres amigos y también la mayor aventura que jamás hubieran esperado pues no será nada fácil encontrar, conseguir, escapar con ellos y destruir todas las partes del alma de Voldermort. Tampoco llevar su amistad a buen puerto pues las trabas son un arma más de la dictadura encubierta que mantiene el Señor Tenebroso y sus esbirros los mortifagos estarán tras ello allá adonde vayan para llevarlo ante su líder y obtener así los galeones que ofrecen por él.

En este tomo su protagonista aprenderá que las apariencias engañan, que el amor es el mejor arma contra todo, que la maldad está destinada siempre a desaparecer de una forma o de otra. Además sus compañeros serán testigos de horrores inimaginables para ellos hasta el momento y aunque todo este perdido siempre podrán confiar en ellos.

Recomendado a todos los que quieran disfrutar del último libro de la saga, de los que no quieren dejar de leer hasta que hayas terminado el capítulo o el libro, también, para aquellos que estén impacientes por descubrir el destino de Harry, Ron y Hermione a lo largo de sus más de seiscientas páginas, y por supuesto descubrir la respuesta a las preguntas de una forma que te dejará sin aliento. Y por último para aquellos que quieran descubrir por completo el mundo mágico en el que se lleva la acción.

Extractos:

La nieve crujía bajo sus pies, pero el animal no hacía ruido alguno al pasar entre los árboles, porque sólo era luz. Fue adentrándose en el bosque, y el chico aceleró el paso, convencido de que cuando la cierva se detuviera, le permitiría acercarse a ella. Y entonces le hablaría y su voz le diría lo que él necesitaba saber.

Fueron momentos muy confusos, de una extraña lentitud, Harry y Hermione se levantaron y sacaron sus varitas mágicas. Muchos magos y brujas se iban percatando de que había pasado algo raro; algunas todavía no habían apartado la vista de donde poco antes se había esfumado el felino plateado. El silencio se propagaba en fríos círculos concéntricos desde el punto en que se había posado el patrunos. Entonces alguien gritó y cundió el pánico.

Luna había decorado el techo de su dormitorio con cinco caras hermosamente pintadas: las de Harry, Ron, Hermione, Ginny y Neville. Los rotros no se movían como en los retratos de Hogwarts, pero aun así había cierta magia en ellos, y a Harry le pareció que respiraban. Una especie de finas cadenas doradas zigzagueaban entre las imágenes, uniéndolas. Las examino con más detenimiento y se dio cuenta de que las cadenas eran en realidad una palabra, repetida miles de veces con tinta dorada: «amigos…amigos…amigos».

Editorial: Salamandra
Autor: J. K. Rowling
Páginas: 640
Precio: 22 euros